La hora de la medianoche en la parábola de las diez vírgenes ha adquirido importancia en la vida real desde que el reloj celestial de la constelación del Horologium marcó las doce el 4/5 de marzo. La noticia de la venida del Esposo, del regreso de Jesús, fue la experiencia más emocionante y cautivante que hemos conocido, y finalmente haber llegado al punto en la parábola cuando el clamor de medianoche fue hecho fue maravillosamente trascendental. ¡Era hora de arreglar nuestras lámparas y alumbrar el camino hacia fiesta de bodas!
Al comienzo del clamor de medianoche, vimos conversiones, bautismos y nueva luz emanando desde el cielo...
Sin embargo, hay oscuridad en el mundo. Al llegar la medianoche, los bancos comenzaron a desmoronarse y los nuevos temores económicos se extendieron rápidamente por todo el mundo. Esto, por supuesto, no puede sorprender completamente a cualquiera que lea el libro de Apocalipsis (o incluso solo la carta de Santiago[1]) y, por lo tanto, sepa que siempre fue profetizado que el fin del mundo estaría acompañado de un terrible colapso del valor monetario. Pero como estudiantes del libro de Apocalipsis, buscamos una mayor comprensión del clamor de medianoche de la parábola de Jesús en el contexto sus profecías.
Como se explica en La perdición del perseguidor anunciada, el momento en que el cometa K2 marcó la medianoche el 4/5 de marzo de 2023 estaba estrechamente relacionado con el cometa C/2023 A3. Esto se debe a que fue dentro de la una hora literal a medida que la manecilla cometaria (K2) pasó el punto de medianoche en el reloj celestial, que la noticia del cometa A3 fue entendida por primera vez por su significado profético en relación con el ángel de Apocalipsis 20 que ata a Satanás por mil años. Este ángel cierra la historia de la tierra y en consecuencia, la comprensión de su cumplimiento significa que el misterio de Dios debe ser consumado de antemano con la señal del Hijo del hombre.
sino que en los días de la voz del séptimo ángel, cuando él comience a tocar la trompeta, el misterio de Dios se consumará, como él lo anunció a sus siervos los profetas. (Apocalipsis 10:7)
Ver a este mensajero de Dios trayendo noticias de la condenación del perseguidor significa que el Señor habrá obtenido la autoridad para atar a Satanás. De otra manera, no podría haber enviado al ángel cometario con ese mensaje.
El séptimo ángel tocó la trompeta, y hubo grandes voces en el cielo, que decían: Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 11:15)
El hecho de que el significado del cometa A3, fue dado exactamente cuando el reloj celestial marcó la medianoche, muestra que esta transferencia de poder había empezado, y que la señal del Hijo del hombre, la señal del reinado eterno del nuevo Rey de la Tierra podría comenzar a desarrollarse una semana después el 12 de marzo. “¡Aquí viene el Esposo!”
Yo estaba en el Espíritu en el día del Señor, y oí detrás de mí una gran voz [el clamor de medianoche] como de trompeta [la séptima], que decía: Yo soy el Alfa y la Omega, el primero y el último [la señal del Hijo del hombre]. Escribe en un libro lo que ves, y envíalo a las siete iglesias que están en Asia... (Apocalipsis 1:10-11)
De modo interesante, cuando nos reunimos para estudiar juntos ese mismo día del 5 de marzo de 2023, el Señor nos indicó que leyéramos al azar un capítulo muy apropiado del libro de Jeremías:
Huid, hijos de Benjamín, de en medio de Jerusalén, y tocad bocina en Tecoa, y alzad por señal humo sobre Bet-haquerem; porque del norte se ha visto mal, y quebrantamiento grande. (Jeremías 6:1)
El capítulo cierra con un indicio de la crisis financiera actual, describiendo a Su pueblo en términos de moneda despreciada, porque el mal no fue purgado de ellos:
Plata desechada los llamarán, porque Jehová los desechó. (Jeremías 6:30)
En el marco del sistema financiero mundial, con el banco Silvergate [que significa puerta de plata] en su punto de quiebre, que marcaría el comienzo de una nueva ola de los no denominados rescates, es muy apropiado que la profecía hable de “plata desechada”, mientras se toca una trompeta y que ya es hora de “huir de en medio de ellos”.
Al mismo tiempo, comenzamos a ver un aumento significativo en el interés en la señal del Hijo del hombre. Esta es una evidencia anecdótica de que los cristianos (las vírgenes en la parábola) en realidad se están despertando para arreglar sus lámparas para buscar al Esposo venidero.
Esta comprensión presenta un dilema para aquellos que (en el lenguaje de la parábola de las vírgenes) están ahora “despertando” y viendo la señal del Hijo del hombre en el cielo. ¿Es demasiado tarde? Según la parábola, la respuesta es “sí y no”. Un cierto tiempo de preparación ha terminado, pero la puerta de la cena de bodas aún no se ha cerrado. Ahora es el momento de arreglar tu lámpara y salir con luz brillante para recibir al Esposo y atraer a tantos otros como sea posible a la procesión de bodas. NO hay tiempo que perder con dudosos vendedores de aceite de fuentes cuestionables, como las cinco vírgenes insensatas que finalmente fueron excluidas.
Con la séptima trompeta de Apocalipsis relacionada con el clamor de medianoche de la parábola, se deduce que “arreglar la lámpara” incluye el estudio de la séptima trompeta para permitir que la luz del entendimiento brille más intensamente. Observa cómo el texto de la séptima trompeta describe este clamor de medianoche:
Y sonó el séptimo ángel; y había grandes voces en el cielo... (De Apocalipsis 11:15)
Obviamente estamos tratando con un evento “ruidoso”: uno que despierta a las vírgenes dormidas. Pero más al punto, hay voces “en el cielo”. Escuchemos atentamente lo que dicen estas voces:
Los reinos del mundo han venido a ser de nuestro Señor y de su Cristo; y él reinará por los siglos de los siglos. (Apocalipsis 11:15)
El texto de la séptima trompeta parece describir el reinado de Cristo como un reinado terrenal, pero Jesús dijo claramente que Su regreso no es para establecer un reino en esta tierra antigua, sino para llevar a Su pueblo al cielo.[2] Entonces, ¿qué quiere decir la profecía con que Jesús reina sobre los reinos de este mundo, si ni siquiera está en este mundo? Es simplemente que Él reina a través de Su cuerpo.
Los fariseos le preguntaron cuándo vendría el reino de Dios.
Él les contestó: El reino de Dios no vendrá como algo que todo mundo pueda ver. Nadie podrá decir: “¡Aquí está!” o “¡Allá está!”, porque el reino de Dios ya está entre ustedes. (Lucas 17:20-21 NBV)
Jesucristo ganó el derecho de convertirse en Rey de la tierra porque Sus hijos han demostrado amor y perseverancia para escudriñar el misterio de Dios hasta su fin[3] y han acogido Su carácter sacrificial, proclamándolo al mundo a través de su testimonio de fe. ¡A la gran voz del clamor de medianoche como una trompeta se unen las voces que declaran que los reinos que pertenecían al príncipe de las tinieblas ahora pertenecen al Rey de la luz a causa de Su pueblo que esta esparcido por toda la tierra! A medida que la tormenta final arrecia, la tierra es, sin embargo, iluminada por la gloria de Dios con gran poder.[4]
Además del aspecto espiritual del cambio de poder, los reinos de esta tierra están divididos y no permanecerán, aunque el mundo entero intente unirse bajo un gobierno o una moneda. El fundamento de cada reino es su dinero, y el abandono del dólar y su inminente implosión (o explosión) es profético. De hecho, es incluso una expresión del reinado de Cristo: cuando la moneda de reserva mundial está perdiendo valor, y otro activo sólido está tomando su lugar, hay un cambio en el poder. Una de las profecías bíblicas más prominentes del regreso de Cristo está conectada exactamente a ese escenario y fue dada a un rey que no quería que el valor monetario de su reino disminuyera. Dios le mostró los reinos de hoy en un sueño:
Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo; desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para siempre, de la manera que viste que del monte fue cortada una piedra, no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación. (Daniel 2:44-45)
Este sueño se está cumpliendo ante tus propios ojos. Describe Bitcoin como la moneda de piedra cortada (o extraída) no con mano (no por trabajo manual), y esta piedra está creciendo para llenar toda la tierra. Todavía es pequeño hoy, pero todos los expertos en el campo saben que inevitablemente subsumirá toda la riqueza presente y futura del mundo, y todo lo demás disminuirá en valor en comparación. Esto significa que las monedas fiduciarias, que están simbolizadas por el oro, la plata, el bronce, el hierro y el barro para representar todo, desde la moneda de reserva mundial USD hasta otras monedas nacionales prácticamente sin valor, serán aplastadas y finalmente desaparecerán en el humo del incendio de Babilonia como se profetiza en Apocalipsis 18.
Entender Bitcoin como un símbolo del reino de los cielos es importante para aquellos que viven en estos días de cambios monetarios profetizados. Dios llama a Su pueblo a salir de Babilonia, de la servidumbre a las monedas fiduciarias. Por favor, mira el vídeo Calles de oro si aún no estás familiarizado con él. Los artículos Pagadle doble y Refugio en el tiempo de la tormenta también son valiosos para comprender el papel de Bitcoin en estos últimos días antes del regreso de Cristo. Pero solo para darte una idea de cómo se está cumpliendo la profecía de Daniel citada anteriormente, considera las noticias recientes de Michael Saylor:
MicroStrategy Paga Préstamo a Silvergate y Compra $150 Millones en Más Bitcoin
En pocas palabras, Michael Saylor tenía un préstamo respaldado por bitcoin con el banco Silvergate,[5]el banco insolvente que desencadenó la “crisis” de medianoche, y cuando Silvergate fue liquidado, Michael Saylor pudo pagar su préstamo a un precio de ganga:
MicroStrategy reveló que había pagado un préstamo que tenía con el banco en quiebra Silvergate por valor de 161 millones de dólares.
También reveló que invirtió 150 millones de dólares en la adquisición de otros 6.455 Bitcoin.
Con esta nueva adquisición, la empresa del maximalista de Bitcoin, Michael Saylor, tiene 138.955 BTC, estimada a un precio de 3.800 millones de dólares. MicroStrategy ha pagado 4.140 millones de dólares para tener dicha participación en Bitcoin.
Ten en cuenta que Satanás no se rinde sin luchar, y la batalla espiritual final del Armagedón también se refleja en la guerra del dinero: a medida que las rampas de entrada y salida de Bitcoin de la carretera del dinero fiduciario son bloqueadas y se rompen, las líneas de batalla se vuelven cada vez más definidas. Observa lo que el G7 está planeando:
Así colaborará parte del G7 para una regulación global cripto “más estricta”
Lo más probable es que la actual crisis bancaria haya sido orquestada intencionalmente para vencer a Bitcoin y justificar la implementación de las CBDC. Pero Apocalipsis habla mucho sobre el dinero, y sus profecías nos dicen que estos planes no tendrán éxito, en última instancia. Felicitaciones irónicas a la Fed de St. Louis por enseñar a los estudiantes estadounidenses que el Imperio Romano cayó debido a la inflación.[6] Vivimos tiempos fascinantes. ¿Cuánto más conocimiento podría darnos esta advertencia de la séptima trompeta acerca del tiempo de angustia presente y futuro?
A las doce en punto en el reloj Horologium, la gran campana celestial comenzó a resonar y el carillón a tocar. Mientras tanto, aunque la constelación del Horologium anuncia la venida de Jesucristo como Rey con el cometa K2, el cometa compañero para formar la señal del Hijo del hombre, E3, estaba cruzando el río al pie de Orión. Esto indica que Jesús, como se representa con Sus heridas en Orión, es el mismo que ahora es proclamado Rey.
La constelación de Orión (que tiene una forma de reloj de arena) también es un reloj, como se describe en la presentación de Orión. Es el lugar celestial descrito en Apocalipsis 4 y 5, donde los 24 ancianos rodean el trono.
Y los veinticuatro ancianos que estaban sentados delante de Dios en sus tronos, se postraron sobre sus rostros, y adoraron a Dios, (Apocalipsis 11:16)
Estos ancianos son instrumentales en la adoración, especialmente durante el sonido del carillón, como a las doce en punto. ¡Ambos cometas comenzaron la señal del Hijo del hombre juntos con el mismo mensaje de adoración que Jesús-Alnitak,[7] el representado en Orión, ahora reinara como Rey de la tierra!
diciendo: Te damos gracias, Señor Dios Todopoderoso, el que eres y que eras y que has de venir, porque has tomado tu gran poder, y has reinado. (Apocalipsis 11:17)
Jesús es revelado de tres maneras principales: pasado, presente y futuro. Estas están representadas en la señal del Hijo del hombre de derecha a izquierda con el bautismo del sacrificio de Jesús en el centro.[8]
En la señal se puede ver a Jesús en Orión, a Jesús en el río representado por Faetón y a Jesús como el Tiempo mismo en la constelación del Reloj. Los tres símbolos son representaciones del tiempo: “que eres” presente en Orión (ministrando Su sangre como Sumo Sacerdote desde los días de Juan), “que eras” en el pasado en el río del bautismo (un símbolo de muerte y resurrección), “que has de venir” en el futuro (desde la perspectiva de Juan) en el reloj de péndulo.
Ahora Él está tomando Su gran poder. El anillo de sello de autoridad ahora está siendo colocado en Su dedo, y podemos ver la firma que lleva, cuando los cometas comenzaron a trazarla en el lienzo celestial. Esto significa que Jesús ahora está sellando a todos aquellos que tienen Su ADN. Aquellos que lo aceptan y creen en Él a través de la señal del Hijo del hombre están recibiendo Su sello figurativamente en sus frentes; cuando miran Su señal en los cielos, Su nombre está escrito en sus mentes y corazones. No permitirán que la humanidad destruya su herencia genética. No harán mal para que sus nombres sean borrados del libro de la vida, porque conocen a Dios.
Pero el mensaje debe salir. Debe llegar a aquellos que necesitan ser fortalecidos y sellados por él. Cuando Jesús estuvo en la tierra, envió a los discípulos como pescadores de hombres:
Y les dijo: Venid en pos de mí, y os haré pescadores de hombres. (Mateo 4:19)
A medida que aumentaba la persecución contra la iglesia primitiva, los cristianos comenzaron a identificarse con la señal del pez, conocida como el ichthys. En la señal del Hijo del hombre, vemos un pez muy grande. Cuando salen como pescadores de hombres, están trabajando para el Gran Pez para traer gente a Su red.
La séptima trompeta también indica que los ayes ahora aumentarán en la tierra al llegar el fin:
Y se airaron las naciones, y tu ira ha venido, y el tiempo de juzgar a los muertos, y de dar el galardón a tus siervos los profetas, a los santos, y a los que temen tu nombre, a los pequeños y a los grandes, y de destruir a los que destruyen la tierra. (Apocalipsis 11:18)
La ira de las naciones está hirviendo en todos los titulares de las noticias en múltiples frentes. Solo una muestra:
19 de marzo - La visita sorpresiva de Putin a Mariupol desata reacciones
14 de marzo - Informe desde Beijing: AUKUS está en el “camino del error y el peligro” según China
El 9 de marzo – “Abajo la ley rusa”: las masivas protestas en Georgia que llevaron al gobierno a retirar una legislación que para muchos seguía el modelo de Putin
El 6 de marzo - Los líderes de los países pobres desatan la ira y la desesperación en la cumbre de la ONU
17 de marzo - Francia estalló contra la reforma previsional que impuso Macron por decreto
14 de marzo – El mayor problema de Estados Unidos es su política, no sus bancos
Sin embargo, no son solo las naciones las que están airadas actualmente. La Biblia también dice de Dios que “Tu ira ha llegado”. Dios está airado. Esto, en el contexto de la séptima trompeta, corrobora que el mundo se está ahora enfrentando cara a cara con el tercer y último ay de Apocalipsis[9] antes de la venida de Jesús.
El primer ay, que se asocia con la quinta trompeta, fue descifrado como la crisis del coronavirus. Como dice el texto, esto fue un ay para aquellos que no tuvieron reparos en perder su identidad como hijos e hijas de Dios.
Y se les mandó que no dañasen a la hierba de la tierra, ni a cosa verde alguna, ni a ningún árbol, sino solamente a los hombres que no tuviesen el sello de Dios en sus frentes. (Apocalipsis 9:4)
Aquellos que valoran el papel de Dios en el diseño del genoma humano para protegerse contra los virus y confían en Su diseño por encima de la invención del hombre en última instancia no fueron dañados por el coronavirus. Incluso si murieron por ello, no pudo tocar sus vidas eternas. Pero aquellos que querían una vacuna a cualquier costo, incluso al costo de eliminar su ADN del linaje del Creador, buscaron activamente la muerte eterna, pero no pudieron obtenerla porque tales vacunas no estaban disponibles de inmediato.
Y en aquellos días los hombres buscarán la muerte, pero no la hallarán; y ansiarán morir, pero la muerte huirá de ellos. (Apocalipsis 9:6)
En algunos lugares como la Unión Europea, las vacunas incluso “huyeron de ellos” en el sentido de que las dosis de vacunas prometidas y pagadas no fue entregada, para disgusto de la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, y de toda Europa.
Los tres ayes de las últimas tres trompetas son más severos que las trompetas en sí (de ahí que se llamen ayes). Sin embargo, la Biblia no da una descripción separada de los ayes aparte de las trompetas. ¿Podría ser que ellos señalan el inicio de las plagas?
Durante la época del coronavirus, poco antes de que las vacunas fueran aprobadas para uso de emergencia, Dios envió un cometa especial—uno que incluso llegó a ser visible a simple vista para muchos—que vino directamente de la mano de Orión. Mientras el sol se oscurecía en el eclipse total de sol de 2020, el cometa C/2020 F3 (NEOWISE) estaba en Orión, preparándose para ser lanzado de “la mano del gigante” a Virgo y a la balanza, indicando que pronto comenzaría el juicio contra la iglesia apóstata.
Dado el escenario del primer ay, se puede hacer una observación interesante sobre la primera plaga. Las llagas descritas en la primera plaga podrían sugerir lo que realmente ocurrió en el mundo a causa de las vacunas COVID-19 y sus poco publicitados efectos secundarios.
Fue el primero, y derramó su copa sobre la tierra, y vino una úlcera maligna y pestilente sobre los hombres que tenían la marca de la bestia, y que adoraban su imagen. (Apocalipsis 16:2)
Observa que la primera plaga también fue selectiva como el primer ay que la precedió, como dice el texto de la quinta trompeta en Apocalipsis 9:4 citado anteriormente. Se dice que el ay aflige a aquellos que no tienen el sello de Dios—correspondiendo a aquellos que fueron atormentados durante los bloqueos y ansiosos por volver a sus excitantes estilos de vida. Cuando salieron las vacunas, estos se alegraron de poder volver a las calles y a sus fiestas. Adorar la imagen representa sostener la ideología que apoya a LGBT (la imagen de la bestia) de que todo lo que la carne desea debe ser concedido.
Los que viven de acuerdo con la imagen de la bestia dieron la bienvenida al ay de la vacunación, que se convirtió en una plaga para muchos. Muchos asistentes a la iglesia también se alegraron de volver a sus clubes sociales, sin importarles tomar una vacuna que interfiere con el diseño genético del Creador. Así, el primer ay (Covid-19), abrió el camino para el segundo ay (vacunación genética), que a su vez condujo a la primera plaga.
El segundo ay está asociado a la sexta trompeta. De hecho, fue la guerra que pocos vieron venir, donde el fuego, el humo y el azufre de la sexta trompeta fueron reconocidos provocando la muerte eterna de una enorme fracción de la población de la tierra a través de la vacunación.
Pero en contraste con los ayes, las plagas siguen temas diferentes, y sólo la primera plaga tiene una relación directa con los ayes, representando las consecuencias físicas duraderas del ay de la vacunación. La segunda plaga aflige a Europa, que es el "mar" en el simbolismo profético, al que corresponde muy bien la guerra de Ucrania:
El segundo ángel derramó su copa sobre el mar, y este se convirtió en sangre como de muerto; y murió todo ser vivo que había en el mar. (Apocalipsis 16:3)
La invasión rusa de Ucrania ha hecho de Europa (porque Ucrania es parte de Europa) como la sangre de un hombre muerto, por así decirlo. Y el temor siempre ha sido que Rusia tome a toda Europa y la convirtiera en un mar de sangre. El texto describe muy bien lo que está sucediendo allí. Describe el estado final, que se ha ido desarrollando a lo largo del tiempo. Las plagas son acumulativas y no se detendrán.
Al igual que con la primera plaga, hubo un cometa que llamó la atención en ese momento, y se “derramó” en la zona del mar celestial mientras las tropas rusas se amontonaban en las fronteras ucranianas hasta que Putin enfureció al mundo estupefacto cruzando al otro lado.
La marea de maldad que ha provocado la guerra no se limita a la muerte de miles de soldados, sino que incluye la conmoción de la economía mundial, el mercado energético y la cadena de suministro de alimentos, de la que el mundo todavía se está tambaleando. El propio cometa—C/2021 O3 (PANSTARRS)—se desintegró antes de abandonar la zona marítima, del mismo modo que ni la guerra ni su estela de muerte han abandonado las fronteras de Europa hasta el día de hoy.
Así, mientras los terrores de la guerra siguen derramándose en la segunda plaga, la lamentable campaña de vacunación se ha paralizado de hecho.
El segundo ay pasó; he aquí, el tercer ay viene pronto. (Apocalipsis 11:14)
Mientras que los ayes se dice que pasan, las plagas perduran y se acumulan. Los ayes conducen a la muerte eterna, mientras que las plagas son consecuencias de las acciones del hombre que afectan a diversos aspectos de la creación.
Esto nos lleva a la tercera plaga:
El tercer ángel derramó su copa sobre los ríos, y sobre las fuentes de las aguas, y se convirtieron en sangre. (Apocalipsis 16:4)
La advertencia de esta plaga sobre las vías fluviales fue dada por el ángel de la tercera trompeta, de quien podemos obtener más detalles. El texto de la tercera trompeta describe un desastre que golpea una parte de los cursos de agua y los envenena con ajenjo:
El tercer ángel tocó la trompeta, y cayó del cielo una gran estrella, ardiendo como una antorcha, y cayó sobre la tercera parte de los ríos, y sobre las fuentes de las aguas. Y el nombre de la estrella es Ajenjo. Y la tercera parte de las aguas se convirtió en ajenjo; y muchos hombres murieron a causa de esas aguas, porque se hicieron amargas. (Apocalipsis 8:10-11)
De modo interesante, el cometa E3 se acercaba precisamente al río Eridanus cuando la séptima trompeta comenzó a sonar en el cielo a medianoche en el reloj Horologium. Siete días después, cruzó el río. En esos siete días, sucedieron muchas cosas interesantes que presagian crecientes problemas como ya hemos visto. Pero aún hay más. El ajenjo puede interpretarse como contaminación radiactiva que se vierte en las aguas. Esta advertencia de la tercera trompeta se manifestó en la tercera plaga, y salió a la luz poco después de que el cometa cruzara el río.
Una planta nuclear en EE.UU. tuvo una fuga de 400 mil galones de agua radioactiva
Se puede imaginar la indignación pública por no ser notificados de una fuga radiactiva hasta cuatro meses después del incidente. Pero este evento tiene un profundo significado espiritual respecto a la fe del pueblo de Dios. La ciudad más grande dentro de la zona de contaminación de la planta es Minneapolis, Minnesota, donde el Espíritu Santo trató una vez de inspirar a Su pueblo con el mensaje de una vida justa por la fe en Cristo, pero fue rechazado. Esta es la infamia de la Sesión de la Conferencia General de 1888 de la Iglesia Adventista del Séptimo Día que se celebró en esa ciudad.
La iglesia adventista estaba en una posición única para combinar su énfasis en la obediencia con la justicia por la fe que todavía se enseña de forma aislada en muchas iglesias de hoy (pero “Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.” — Santiago 2:17). Cristo trató de dar el cuadro completo para Su pueblo a través de esa iglesia, pero ellos rechazaron al Espíritu Santo y permitieron que sus aguas—su enseñanza—se contaminaran. Ahora ha llegado al punto de que promueven activamente la vacunación Covid y la proporcionan en los propios terrenos de la iglesia, engañando a almas confiadas para que voluntariamente pierdan su identidad genética como hijos e hijas de Dios—contaminando sus propias “fuentes” genéticas. ¿Cómo se puede vencer un virus como el que ha infectado a la iglesia? Lee sobre ello en Cristo en Ti, el gen de la gloria—representado en la señal del Hijo del hombre por el río celestial y el bautismo en Cristo.
Para comprobar la idea de que el tercer ay está efectivamente relacionado con la tercera plaga, debemos seguir examinando los versículos restantes de la descripción de la plaga:
Y oí al ángel de las aguas, que decía: Justo eres tú, oh Señor, el que eres y que eras, el Santo, porque has juzgado estas cosas. Por cuanto derramaron la sangre de los santos y de los profetas, también tú les has dado a beber sangre; pues lo merecen. (Apocalipsis 16:5-6)
Aquí otro ángel es introducido que atribuye justicia al Señor por Sus juicios: el “ángel de las aguas”. ¿Qué ángel podría ser este? Sin tener este versículo en mente, una persona expresó interés en un comentario en uno de nuestros videos de saber acerca del cometa, C/2021 S3 (PanSTARRS), que está presente dentro de la señal del Hijo del hombre. (Tal comentario es un deleite para nosotros y para el Señor, ya que muestra interés y curiosidad acerca de los mensajes que Dios está enviando desde el cielo). Este cometa apenas visible con perihelio en 2024 no ha aparecido mucho en la prensa, y no lo habíamos considerado hasta ese momento, pero ver el cometa en la constelación de Columba (la paloma) a medida que la tercera copa (representada por E3) fue derramada sobre las aguas sugirió un posible significado.
Tras la investigación, resulta que el cometa S3 ciertamente vino de Eridanus (las aguas), donde estaba cuando comenzó el mensaje de Orión en 2010, así que encaja con la descripción del “ángel de las aguas”. Desde entonces, ha salido de las aguas para dar vueltas alrededor de Columba (la paloma) en este momento en que comienza la tercera plaga, lo que hace que su discurso sea el testimonio del Espíritu Santo. ¡Qué apropiado que el Espíritu Santo diera testimonio de la justicia del Señor tal como lo hizo en Su bautismo, que este cometa destaca en la señal!
Y Jesús, después que fue bautizado, subió luego del agua; y he aquí los cielos le fueron abiertos, y vio al Espíritu de Dios que descendía como paloma, y venía sobre él. Y hubo una voz de los cielos, que decía: Este es mi Hijo amado, en quien tengo complacencia. (Mateo 3:16-17)
Es el mismo Espíritu Santo cuyo mensaje de la justicia por la fe fue rechazado en 1888, quien ahora confirma que nuestro Señor, representado en tres retratos del presente, pasado y futuro, es justo. El cometa E3 se encuentra en las aguas aquí al comienzo de la señal como lo hizo Jesús en Su bautismo, pero trazando su trayectoria hasta el final de la señal, marca la hora de la resurrección cuando la voz del Padre será escuchada en aprobación de los miembros justos del cuerpo de Cristo.
Esa voz del cielo en el bautismo de Jesús no fue hablada sólo para Aquel que no necesitaba purificación del pecado. Fue hablada a cada alma que acepta a Jesús como su Señor y lo sigue en las aguas sacrificiales de la abnegación. Aquellos que comprometen sus vidas a una obra de amor a un costo ilimitado para sí mismos, serán declarados por Dios y testificados por el Espíritu Santo como “Sus hijos amados, en quien tiene complacencia”. Esto enfatiza por qué la escena del bautismo de Jesús está en el centro de la señal del Hijo del Hombre.
En el texto de la tercera plaga, hay una tercera voz desde el altar dando testimonio:
También oí a otro, que desde el altar decía: Ciertamente, Señor Dios Todopoderoso, tus juicios son verdaderos y justos. (Apocalipsis 16:7)
El altar con sus cuatro cuernos está representado por Tauro, que también tiene cuatro “cuernos” que irradian desde el área central. La única voz que estaba en Tauro el 12 de marzo de 2023 era Marte, el planeta de guerra que imparte el color de la sangre a los ríos, situado perfectamente entre los cuernos del toro. Esto parecería responder a la pregunta de qué implicará la tercera plaga, una vez que se haya desarrollado por completo. Marte indicaría guerra, y esto encajaría con la perspectiva de una guerra mundial nuclear, ya que la contaminación radiactiva del agua como la vista en Minneapolis es algo que también resultaría de una guerra nuclear. La fuga de la planta nuclear es solo un leve indicio de lo que la nación podría lamentar si va a la guerra con otras superpotencias nucleares. Así, vemos que las plagas aumentan en severidad con el tiempo.
Y esto nos lleva de vuelta al fracaso de la iglesia adventista en 1888: ella, como todas las iglesias, rehusó aceptar el mensaje completo de la justicia por la fe que debe resultar en obras de amor acordes con dicha fe. Aquellos que sólo descienden a las aguas del bautismo para que sus pecados sean lavados, pero no salen de las aguas a una nueva vida de servicio abnegado por amor a Cristo, nunca pueden escuchar esas palabras consoladoras de propiedad paterna: “Este es Mi hijo amado”.
La séptima trompeta empieza a sonar después de que hayan concluido los dos primeros ayes, y teniendo en cuenta que ya casi nadie se vacuna por primera vez, ese momento ha llegado efectivamente:
El segundo ay pasó; he aquí, el tercer ay viene pronto. El séptimo ángel tocó la trompeta… (Apocalipsis 11:14-15)
Esta última trompeta casi siempre se ha entendido como la culminación del apocalipsis, incluyendo las plagas destructivas, porque menciona el granizo:
Y el templo de Dios fue abierto en el cielo, y el arca de su pacto se veía en el templo. Y hubo relámpagos, voces, truenos, un terremoto y grande granizo. (Apocalipsis 11:19)
Independientemente de si este granizo es una referencia al mismo granizo de la séptima plaga, o si es un granizo distinto, todavía muestra que los juicios divinos se vuelven destructivos después de que la séptima trompeta suena.
Además, ahora podemos ver que no todas las plagas comienzan después de que la séptima trompeta suena. Primero, sin embargo, sólo se describen los acontecimientos celestiales que rodean la posesión de los reinos de la tierra por el Señor; sólo después se mencionan los juicios sobre el mundo.
Esto enfatiza el hecho de que un rey no ejecuta a sus enemigos hasta que ha sido instalado en el trono.[10] La revelación del arca mencionada en el texto de la séptima trompeta, como se explicó anteriormente, representa la inminencia de la justicia absoluta: la debida recompensa que se da a los enemigos de Dios a través de los medios mencionados de relámpagos, truenos, terremoto y granizo. Este no era el caso antes y apunta a un tiempo venidero sin misericordia.
Dios no es inmisericorde en Su naturaleza, pero hay un tiempo cuando los malvados han rechazado las súplicas de misericordia hasta el punto de que ninguna misericordia más puede apelar a sus corazones endurecidos. No importa cuánto tiempo más se les pudiera dar, no harían ningún cambio de dirección. La prueba de la misericordia infalible de Dios está en el hecho de que incluso durante este tiempo, Él protegerá a aquellos que lo han elegido, pero llegará el tiempo de juzgar a los impíos con justicia.
¡Oh, si tan sólo el mundo pudiera conocer el tiempo de su visitación! Numerosos son todavía los que no han oído la verdad que debe probarlos en este tiempo. El Espíritu de Dios contiende todavía con muchos. El tiempo de los juicios destructores divinos es tiempo de gracia para quienes no han tenido oportunidad de conocer la verdad. El Señor los mirará con amor. Su corazón compasivo se conmueve; su brazo está todavía extendido para salvar, mientras que la puerta ya se cierra sobre aquellos que rehusaron entrar. {9TPI 80.2}
Esta progresión de endurecimiento de la justicia se puede ilustrar de la siguiente manera:
La división entre las dos plagas que preceden a la señal del Hijo del hombre y las cinco plagas que la acompañan, sugiere una correlación con los hombres con instrumentos para destruir que Ezequiel vio que iban a matar a todos los que no se lamentaban por las abominaciones cometidas en la tierra y, por tanto, no recibían la marca de Dios.
Y he aquí que seis varones venían del camino de la puerta de arriba que mira hacia el norte, y cada uno traía en su mano su instrumento para destruir. Y entre ellos había un varón vestido de lino, el cual traía a su cintura un tintero de escribano; y entrados, se pararon junto al altar de bronce. (Ezequiel 9:2)
Observa el papel del varón con el tintero de escribano para sellar al pueblo de Dios. El tiempo encaja perfectamente con el sellamiento por medio de la señal del Hijo del hombre descrito anteriormente en este artículo. Primero pasa el varón vestido de lino y sella, luego le siguen los otros cinco.
y le dijo Jehová: Pasa por en medio de la ciudad, por en medio de Jerusalén, y ponles una señal en la frente a los hombres que gimen y que claman a causa de todas las abominaciones que se hacen en medio de ella. Y a los otros dijo, oyéndolo yo: Pasad por la ciudad en pos de él, y matad; no perdone vuestro ojo, ni tengáis misericordia. Matad a viejos, jóvenes y vírgenes, niños y mujeres, hasta que no quede ninguno; pero a todo aquel sobre el cual hubiere señal, no os acercaréis; y comenzaréis por mi santuario. Comenzaron, pues, desde los varones ancianos que estaban delante del templo. (Ezequiel 9:4-6)
Una manera de entender la orden: “en pos de él”, es que los verdugos empiezan su trabajo antes de que el varón vestido de lino haya terminado, pero siguiendo su trayectoria. Esto es posible porque, en cuanto el varón vestido de lino pasa por una zona, los verdugos tienen claro qué decisión ha tomado cada una de las almas allí presentes. O han sido marcadas o no; no hay una segunda oportunidad. El varón vestido de lino no hace ninguna otra ronda, sino que visita a cada individuo una sola vez. Las plagas de este período de la venganza de Dios son el tema de un próximo artículo.
Esto es de suma gravedad para cada persona viva hoy que aún no ha recibido la vacuna o no se ha puesto del lado de los enemigos de Dios. La marca del sellamiento ahora se está haciendo visible en el cielo, y aquellos que reciben el sello, aquellos que permiten que se grabe en sus mentes, son los que figurativamente están marcados por el varón vestido de lino. Ellos son sellados en Su nombre, mientras que aquellos que no hacen caso a Su invitación son destruidos.[11]
Y en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo, dado a los hombres, en que podamos ser salvos. (Hechos 4:12)
Ese nombre es Jesús: ¡Alnitak de Orión, el Alfa y la Omega, Él que fue herido! Esta es la última oportunidad. Esta es la última oportunidad de recibir la señal de Jesucristo, a través del Espíritu Santo, o ser excluido como las vírgenes insensatas. En los días de Ezequiel, la señal literal era la antigua letra hebrea tav, la última letra del hebreo alefbet, que parece una cruz. Hoy estamos hablando de recibir el bautismo del Espíritu Santo como se ilustra en la señal del Hijo del hombre, en el que se representa el bautismo del Alfa y la Omega que murió por ti.
Si oyereis hoy su voz, si oís su voz. No endurezcáis vuestro corazón... (Del Salmo 95:7-8)
¡Escúchalo![12] ¡Escucha al varón vestido de lino con el tintero de escribano, que no es otro que el Sumo Sacerdote representado en Orión! Escucha a Aquel que dio Su vida por ti, ilustrado como Faetón, inmóvil en ese Gran Sábado[13] en el río del tiempo. Escucha al Rey de reyes que habla ahora con toda autoridad en la Tierra, representado por el reloj de péndulo que ha marcado la medianoche.
Cuando estas cosas comiencen a suceder, erguíos y levantad vuestra cabeza, porque vuestra redención está cerca. (Lucas 21:28)
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